El Bonito del Norte

A pesar de que en Conservas La Polar producimos todo tipo de conservas de pescado: Atún, Sardinillas, Zamburiñas, Mejillones, Berberechos, Oricios… y también platos cocinados: Garbanzos con Bacalao, Pote Asturiano, Fabada y Verdura, el Bonito del Norte es sin duda la estrella.

Por eso la mayor parte del trabajo en la conservera se concentra entre junio y octubre, coincidiendo con la temporada del bonito. En los meses de verano se aprovecha la costera del Cantábrico lo máximo posible. Todo el Bonito del Norte con el que trabajamos en Conservas La Polar es fresco.

Manos enlatando bonito
Persona cortando bonito

La actividad en la fábrica apenas varía a pesar del paso del tiempo, seguimos elaborando nuestras conservas como toda la vida. El tiempo de cocción de los bonitos varía según su tamaño, siendo de hora y media para los pequeños, dos horas y media para los medianos y hasta cuatro horas para los grandes. Después viene el pelado, que se hace a mano, trozo a trozo. De cada bonito salen cuatro lomos y se separa la ventresca. A continuación, se empacan los trozos también a mano para a continuación cerrar las latas y luego esterilizar.

La ventresca de Bonito del Norte es la parte más cotizada y delicada del Bonito del Norte (Thunnus alalunga). Se trata con el máximo cuidado, cortándola y envasándola a mano de forma artesanal. El resultado es una conserva de presentación perfecta, con un tronco grande de color blanquecino, aroma limpio, textura jugosa y un sabor natural, profundo y delicado. El aceite de oliva utilizado realza su sabor sin ocultar su esencia. Creenos, es de La Polar es un Bonito del Norte en conserva, inigualable.